Era la primera vez que ganaba las elecciones, ella, presidenta de Rusia. Subió al coche oficial para pasear por la Gran Plaza Roja y su esposa la acompañaba, saludando todos y todas las ciudadanas rusas. En poco tiempo alcanzaron la tribuna, la presidente rusa bella, elegante y con su gran fortuna, tras aquel diálogo con su pueblo, tras aquella hermosas palabras pronunciadas con finura, se volvió y beso en la boca a su esposa para alegría de toda Rusia.
Autor: D. Jesús Castro Fernández.
Autor: D. Jesús Castro Fernández.
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